El cuarto del revés...

Acá en el mundo chiquito en paredes
ofrece una seguridead el silencio, la quietud.
El ingenuo se convierte en superheroe,
las balas rebotan los cuatro vientos,
una serenidad enorme acontece.
Se puede pensar, quedar absorto igual.
Y la parte se ve pasar,
la realidad desprecia tanto,
que la inmutabilidad de estar,
da igual si desapareciera para dentro de un rato.
Quién notaría la ausencia más que unos cuantos?

Acá en el mundo chiquito,
todos los pasos se pisaron mientras pisables,
oros mas para otros días.
Antes mirada feliz de nene inconsciente,
llanto tardío después adolesciendo,
y ahora el silencio éste,
la contemplación sináptica,
tratando de hilvanar para algún lado,
a donde mierda decida ese algo,
ese algo de vos y de tiempo.

Acá en el mundo chiquito,
rompe un alarido de títere,
como siempre marioneta de barrio.